Les invito a los lectores que mientras leen este escrito, hagan volar su imaginación y trasladen los acontecimientos que vivimos en nuestro país, con las vivencias de un pueblo que cambio el paradigma de la ignorancia por el de la cultura.
Finlandia no tiene muchos recursos naturales. El himno nacional dice: ...somos un país pobre, que no tiene oro. El recurso que tenemos es nuestro pueblo. Así, invertimos en nuestro pueblo. Toda persona tiene que recibir formación y educación para ir tan lejos como su capacidad lo permita.
Si un país busca inspiración para enfrentar dos de sus principales problemas (educación y corrupción), difícilmente se podría dejar de visitar un lugar más apropiado que Finlandia.La presidenta finlandesa, Tarja Halonen, adelanta algunas palabras-clave: “fuerte inversión en educación” (6% del PIB en Finlandia, sin contar investigación); transparencia en el gobierno; y fidelidad partidaria; es muy importante tener el coraje de reservar los recursos para la educación básica", resalta ella.
Un pueblo educado sabrá elegir a dirigentes honestos y competentes. Estos elegirán los mejores asesores. Un pueblo inteligente y educado no permite corruptos ni incompetentes. Un pueblo ignorante desperdicia sus recursos y se empobrece. Un pueblo ignorante vive de ilusiones. Un pueblo educado sabe muy bien diferenciar un discurso serio de una disertación demagógica. Un pueblo educado prospera también en condiciones adversas.
Finlandia posee una economía altamente industrializada, con producción “per cápita” mayor que la del Reino Unido, Francia, Alemania e Italia. Un pueblo ignorante es terreno abonado para la demagogia.El patrón de vida finlandés es elevado. El sector clave de su economía es la industria - principalmente maderera, metalúrgica, ingeniería, telecomunicaciones (se destaca Nokia) y productos electrónicos. El comercio exterior es importante, representando cerca del 1/3 del PBI. Con excepción de la madera y de varios minerales, Finlandia depende de importaciones de materias primas, energía, y algunos componentes de bienes manufacturados.
El pensamiento de su Presidenta difiere bastante con el de nuestras autoridades actuales, cuanto más ignorante sea el pueblo… más van a perdurar ellos y más enriquecimientos ilícitos habrá. La corrupción siempre estará presente porque es el negocio de los sinvergüenzas.
Pero, en cambio, en nuestro país decimos que en Finlandia hace mucho frío y oscurece antes, y que aquí preferimos el tapeo y las movidas nocturnas. Claro está, así nos va, la España de la pandereta y ferias. Amigos míos que tuvieron la oportunidad de unas becas Erasmus, decidieron quedarse allí, y aunque echen de menos la familia y el clima, se sienten orgullosos del conocimiento que han aprendido en esos años, que no cambiarían por nada del mundo.
El Consejo de Europa ha tomado nota de dos de los temas que más alteran a la opinión pública española: “El aumento de casos de corrupción política que están causando verdaderos estragos en la credibilidad de las instituciones, y la gestión de algunas regiones y gobiernos locales en relación con prácticas irracionales de gasto”. En esas prácticas incluyen “la construcción de faraónicos proyectos o el pago de enormes salarios a algunos políticos locales y regionales, entre otros dispendios”(leamos Gurtel, Púnica, Viajes, dietas, etc.)
Por eso quiero hablar hoy de cultura, y que no es otra cosa que aquellas expresiones, que el hombre ha ido incorporando a la naturaleza. A la tierra como un todo. Nuestros pensamientos, nuestra arte, la arquitectura, la literatura, la historia, la investigación, el cine, el teatro en fin, toda creación humana, es cultura. Se dice que cultura, es todo aquello que un hombre necesita saber, para poder actuar de manera correcta, dentro de un grupo social. Por lo mismo, a veces, cuando vamos a otros países, podemos cometer ciertos errores de procedimiento. Ya que nosotros, no compartimos los mismos códigos culturales. Y no hablamos aquí de la cultura del entretenimiento, sino de aquella que nos lanza hacia la creación, hacia la libertad, hacia lo generosidad y el compromiso.
Hemos llegado a un punto de saturación tal que considero que es necesario re-humanizar la cultura y, más concretamente, las actividades culturales. Soy consciente de que no es una labor fácil y que la tecnificación sigue su curso, pero también percibo por mis propios ojos que la cultura mediterránea, la cultura latina, sigue valorando los espacios abiertos y la calidez de las relaciones humanas, por lo que todavía existe la esperanza de que esta tendencia sea reversible. Su acercamiento nos haría más felices y más crítico con la realidad, en definitiva, más humanos.
A nosotros sí que nos gustaría subrayar la importancia de la cultura más que nunca en tiempos de crisis, la cultura nos enriquece como personas, nos hace crecer, nos abre la mente y nos da la oportunidad de conocer muy distintos puntos de vista, diversos rincones del planeta, cada uno de ellos con su idiosincrasia particular, consiguiendo así replantearnos las “verdades absolutas”, cuestionar los status quo, y que nos llena de argumentos con los que poder rebatir o aplaudir determinadas actuaciones.
Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: «¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!». Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.
Al final, con que carta nos quedamos, ¿con la ignorancia, la corrupción, o con la cultura? En nuestras manos está el destino de nuestro país.
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domingo, 23 de noviembre de 2014
jueves, 16 de octubre de 2014
TENEMOS MIEDO...
Tenemos miedo, pero el
miedo los provocan otros para que permanezcamos ocupados, y olvidemos otros
graves problemas. Ayer escuchaba un video de Miquel Figueroa sobre el Ebola, y
ciertamente entendí muchas cosas que siempre me han preocupado, pero que mi pequeña
voz y protesta poco podía hacer.
¿Qué hay detrás de todo
esto? ¿Cómo vive estas situaciones la industria farmacéutica? ¿Qué piensan las
grandes multinacionales? ¿Con que presupuesto se nutre la OMS? El 28% es
contribución de los países, y el resto por empresas multinacionales que mueven
el mundo: Bill Gates, Coca-Cola, Nestle, etc.? ¿Y por qué estas empresas
ayudan, esperan algo a cambio? La industria farmacéutica perdería sus patentes
si se buscan otras soluciones más económicas. ¿Por qué no aceptar que existen
otros caminos para solucionar los problemas de la humanidad? ¿Cómo se puede
tener la patente del virus del Ebola los Estados Unidos? ¿Qué hay detrás de
todo eso? Si, manipulación y poder que son las armas de estos países que han
expoliado todo lo que encuentran a su paso: los mares con las perforaciones
petrolíferas, las industrias aunque nos intoxiquen de sustancias cancerígenas,
la energía nuclear radiando sustancias mortíferas en nuestro entorno, los ríos
contaminados de residuos industriales, etc., y un largo etcétera del que
prefiero no seguir hablando porque me retuercen las tripas…
No dejo de pensar los
millones de muertes que pueden ser evitadas en estos países que les estamos
dando la espalda, y en estos momentos estoy pensando en África. Nuestra forma
de vivir y pensar nos impide entender lo que es el hambre, la lepra, el dengue,
el sida, las fiebres hemorrágicas, la tuberculosis, etc.. y como no el hambre y
el desarrollo para que estos países abandonados, dependan de sí mismo.
¿Podremos seguir
durmiendo, sabiendo que esto está destruyendo la humanidad?
Aquí os dejo la dirección
de un video, que al menos creo que se debería visionar con objetividad, para
saber algo que siempre se nos oculta, por las razones que sean. Sabemos que
digamos lo que digamos, el poder siempre tIene la razón, aunque vaya en contra
de sus propios principios. https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=622421091208064&id=100003205354412&_rdr
miércoles, 17 de septiembre de 2014
LA BORRACHERA DEL PODER, LOS LLEVARÁ A LA TUMBA...
Leyendo hace unos días una reseña de la revista Foreign Affairs sobre el libro de Owen (político y médico británico que escribía en 2008): “En muchos jefes de Estado, la experiencia del poder les provoca cambios psicológicos que los conducen a la grandiosidad, al narcicismo y al comportamiento irresponsable. Líderes que sufren de este síndrome hubris(arrogancia, enfermos del poder) ‘político’ creen que son capaces de grandes obras, que de ellos se espera grandes hechos, y creen saberlo todo y en todas las circunstancias, y operan más allá de los límites de la moral ordinaria”.
Cuantos temblores estamos notando en nuestros políticos, algunos con ciertas prisas preparando las maletas, otros quitando todo rastro de corrupción, no vaya ser que busquen las incongruencias de sus decisiones y de sus bolsillos. Algunos lloraran porque les quitarán las placas de tantas inauguraciones y tanta borrachera de adulaciones. Se acabaran las ”paellas” recoge votos. Empezarán adelgazar, pues las suculentas comidas pagadas por los ciudadanos se acabarán, no necesitaran hacer una dieta, la vida se la impondrá. Los miedos los acorralan, porque saben que antes o después serán expulsados por los mismos que los encumbraron en el poder… Así es la vida, la historia no perdona, pagaran por esa verborrea pagana e inmoral que durante tantos años han cultivado, y como dice la frase bíblica habrá lloro, que es el resultado del dolor indescriptible por los remordimientos del deber no cumplido.
Sabemos además, que durante este tiempo de poder, lo que buscaban era tener una jubilación asegurada, y claro está, a costa de los ciudadanos, y que estos, no tienen ni para dar de comer a sus hijos… A ellos no les interesa las preocupaciones de su pueblo, solo la fachada para que siempre hablen bien de ellos.
El diagnóstico de estos políticos o enfermos del poder, están el uso del poder para autoglorificarse, pérdida de contacto con la realidad, preocupación exagerada por su imagen y la creencia de que solo Dios o la historia puede juzgarlos; pero el remedio lo conocen aunque escasea en el país: la humildad.
Espero y ansío que esto cambie, que los ciudadanos tomen conciencia del camino que hay que recorrer. Sigo teniendo la esperanza de que existe “gente buena” y que tirarán del carro con las manos limpias…
martes, 22 de julio de 2014
ESTA MALDITA CASTA...
Curiosamente el mundo
está envuelto en tanta “mierda”, que hasta los políticos se encierran en su
caparazón para no tener que definirse ante acontecimientos que hacen estremecer
la humanidad.
Así tenemos dos ejemplos
muy claros y cercanos a nuestro mundo local. Por una parte, el Alcalde de
Torremolinos del Partido Popular, dice abiertamente “que los discapacitados son
un estorbo” (busquen el video que censuraron pululando por Youtube); se me cae
la cara de vergüenza de tener estos políticos dirigiendo nuestros pueblos, que
son nuestros, no de ellos.
Y no más cercano, su
compañero de partido el Alcalde y Diputado Joaquin Vilanova y su grupo de
gobierno (que son de la misma “casta”), que no son capaces de condenar el
genocidio que se está cometiendo en la franja de Gaza, presentado por todos los partidos políticos a excepción,
claro está, del PP para que fuera condenado, pero no se atrevieron; donde el
20% de las muertes son niños, que
solamente se dedicaban a jugar en las playas. Esto estremece a cualquiera que
tenga sentimientos y algo de ternura. Ellos no la conocen, porque no quieren
salir de su poltrona del poder; pero deben saber, que ellos están provocando
una guerra en nuestro país, y que lo pagarán muy caro. Antes o después dejarán
el poder, ya sea porque pierdan las elecciones, o porque el pueblo se subleve
ante tanta barbarie, y ellos serán los ÚNICOS RESPONSABLES de esta situación,
ya no habrá excusa que valga, tendrán que apechugar con las consecuencias, y la
historia los juzgará como los que hundieron al país. Igualmente hacen con
nuestros niños que les falta lo necesario para comer y no se atreven abrir
comedores para ellos, aunque se gasten en fiestas el dinero de los
contribuyentes.
Ellos debían estar
preocupados por las nuevas fuerzas políticas que nacen del pueblo. Les atacan
por todos los lados, pero les están haciendo un bien inimaginable a Podemos,
pues muchos que podrían tener dudas, se están definiendo por esa ruta nueva.
Muchos dirán “que más vale malo conocido que bueno por conocer”, pero en este
caso no sirve este refrán; esta país necesita aire fresco, y dejar a un lado a toda
esta casta de rancios y esperpentos que dirigen nuestro país. Dejar paso a esa
juventud a la que la hemos condenado al paro, al desahucio, al huir de nuestro país,
a la desilusión, etc.. Ellos no se merecen este castigo. Podrán equivocarse
esta nueva oleada, pero lo que si es cierto, que los que nos han engañado han
hecho tanto daño, que ya no hay excusa para mantenerlos en el poder. Los ricos
y poderosos, siguen siendo más ricos y poderosos a costa de la clase humilde y
sencilla que solo sabe del trabajo de cada día, del dolor y sufrimiento
compartido con sus familias.
No sé si todavía están a
tiempo para rectificar, pero si para hacer un examen de conciencia y no creerse
en la posesión de la verdad. No saben amigos lectores que muchas de las armas
que se están utilizado en las guerras actuales son de fabricación española (¿se
acuerdan de las bombas de racimos?), y digo esto porque la experiencia en los
Campos de Refugiados me lo ha demostrado. Decimos que queremos la paz pero
fabricamos las armas y las vendemos al mejor postor. Creo que es más importante
morir que matar…
domingo, 20 de abril de 2014
LA MEDIOCRIDAD ES NUESTRA MARCA ESPAÑA…
La mediocridad es el olvidarse de crecer.
El conformismo de lo que está. ¡Es la muerte en vida! Si no aspiramos a crecer,
a cultivarnos, a aprender cada día algo nuevo, a enseñar nuestras pocas
sabidurías, a investigar lo desconocido, a escalar en las alturas
inalcanzables.....¿para qué vivir?.
Muchas más cosas serían posibles
si dejáramos de ser cautivos del miedo. Hay que aprender el arte de
navegar por la vida.
La mediocridad es un estado en que se pierden las ganas y el
amor a lo que se hace, es dejar de poner todo nuestro esfuerzo para culminar
nuestras actividades; ser mediocre es perder la capacidad de pensar y de
utilizar nuestras capacidades y actitudes. Qué fácil es hablar de lo que no se
sabe usando los gritos y la prepotencia, así vemos muchas veces a nuestros
políticos cercanos: hablan de pintura como si hubieran estado toda la vida
estudiando en Bellas Artes; hablan de historia como si la hubieran estudiado y
nunca han investigado; hablan del medio ambiente, y no son capaces de entrar en
la racionalización del medio; hablan de arqueología y no saben distinguir una
pieza de barro de otra; hablan de religión y de cofradías y no son creyentes; hablan
y hablan bla, bla, bla y no dicen nada,
porque el vacío que les llena les impiden avanzar, pero se sienten dioses. Se
les olvidó que la humildad es la que te hace crecer en bondad, en solidaridad,…
Así recuerdo aquel artículo de Alex Rovira “Fértil humildad”,
donde nos dice que “La humildad nos
habla de liberarnos de lo accesorio para poder desarrollar lo esencial. Nos
invita también a darnos cuenta de que son precisamente nuestras limitaciones
las que nos hacen humanos y que, gracias a ellas, podemos tomar conciencia de
lo que nos queda por hacer y por crecer. Por ese motivo, la expresión sincera
de la humildad no es signo de ingenuidad o debilidad, más bien todo lo
contrario, lo es de lucidez y de fuerza interior. Lejos de ser frágil, la
humildad nos muestra la grandeza de la persona que la manifiesta, precisamente
porque nace del sentimiento de la propia insuficiencia: siempre hay algo o
alguien de quién aprender, siempre es posible hacer las cosas mejor, siempre
uno puede cuestionarse el valor y sentido de lo que está haciendo en su vida
personal y profesional, y desde allí enfrentar nuevos retos, desarrollar nuevas
habilidades, aprender nuevas lecciones o construir nuevos puentes.”
Ser mediocre es seguir una rutina y no
optar por el cambio, por la innovación, por el riesgo, es seguir una línea que
nos lleva al fracaso y no al éxito porque las personas mediocres no les importa
el lugar solo les importa seguir adelante, la mediocridad intelectual es ser
rutinario, para el hombre rutinario el cambio, lo nuevo, lo experimental es
algo atrevido ya que no está capacitado para salir de su molde, está diseñado
para producir siempre lo mismo, el hombre rutinario no quiere escapar de su
rutina y de sus errores, para el todo lo que hace está perfecto. Este tipo de
personas que no poseen la capacidad de cambio no tienen un futuro prometedor,
ya que no son competentes en ningún lugar a donde lleguen.
El verdadero hombre mediocre, la cabeza
es un simple adorno del cuerpo, es decir, que ha perdido la capacidad de pensar
y de tomar sus propias decisiones, ha perdido su motivación y deseo de mejorar
y ser útiles a la sociedad son unos cuerpos sin alma, ser mediocre
intelectualmente es actuar siempre con un sentido común y no utilizando la
capacidad de pensar, el mediocre no se atreve a mirar más allá de sus narices,
no se atreve a salir de su propia jaula, se vuelve un ser inerte. Solo desean
aplausos e inauguraciones, y rodearse de aduladores, que por lo general se
venden por un plato de lentejas…
El triunfo de los
mediocres de
ANTONIO
FRAGUAS DE PABLOS (FORGES):
“Quienes me
conocen saben de mis credos e idearios. Por encima de éstos,
creo que ha llegado la hora de ser sincero. Es, de todo punto, necesario hacer
un profundo y sincero ejercicio de autocrítica, tomando, sin que sirva de
precedente, la seriedad por bandera.
Quizá ha llegado la hora de aceptar que nuestra
crisis es más que económica, va más allá de estos o aquellos políticos, de la
codicia de los banqueros o la prima de riesgo.
Asumir que nuestros problemas no se terminarán
cambiando a un partido por otro, con otra batería de medidas urgentes, con una huelga
general, o echándonos a la calle para protestar los unos contra los otros.
Reconocer que el principal problema de España
no es Grecia, el euro o la señora Merkel. Admitir, para tratar de corregirlo,
que nos hemos convertido en un país mediocre. Ningún país alcanza semejante
condición de la noche a la mañana. Tampoco en tres o cuatro años. Es el
resultado de una cadena que comienza en la escuela y termina en la clase
dirigente.
Hemos creado una cultura en la que los
mediocres son los alumnos más populares en el colegio, los primeros en ser
ascendidos en la oficina, los que más se hacen escuchar en los medios de
comunicación y a los únicos que votamos en las elecciones, sin importar lo que
hagan, alguien cuya carrera política o profesional desconocemos por
completo, si es que la hay. Tan solo porque son de los nuestros.
Estamos tan acostumbrados a nuestra
mediocridad que hemos terminado por aceptarla como el estado natural de
las cosas. Sus excepciones, casi siempre, reducidas al deporte, nos sirven para
negar la evidencia.
- Mediocre es un país donde sus habitantes pasan una media de 134 minutos al día frente a un televisor que muestra principalmente basura.
- Mediocre es un país que en toda la democracia no ha dado un solo presidente que hablara inglés o tuviera unos mínimos conocimientos sobre política internacional.
- Mediocre es el único país del mundo que, en su sectarismo rancio, ha conseguido dividir, incluso, a las asociaciones de víctimas del terrorismo.
- Mediocre es un país que ha reformado su sistema educativo tres veces en tres décadas hasta situar a sus estudiantes a la cola del mundo desarrollado.
- Mediocre es un país que tiene dos universidades entre las 10 más antiguas de Europa, pero, sin embargo, no tiene una sola universidad entre las 150 mejores del mundo y fuerza a sus mejores investigadores a exiliarse para sobrevivir.
- Mediocre es un país con una cuarta parte de su población en paro, que sin embargo, encuentra más motivos para indignarse cuando los guiñoles de un país vecino bromean sobre sus deportistas”.
- Mediocre es un país donde la brillantez del otro provoca recelo, la creatividad es marginada –cuando no robada impunemente- y la independencia sancionada.
- Mediocre es un país en cuyas instituciones públicas se encuentran dirigentes políticos que, en un 48 % de los casos, jamás ejercieron sus respectivas profesiones, pero que encontraron en la Política el más relevante modo de vida.
- Es mediocre un país que ha hecho de la mediocridad la gran aspiración nacional, perseguida sin complejos por esos miles de jóvenes que buscan ocupar la próxima plaza en el concurso Gran Hermano, por políticos que insultan sin aportar una idea, por jefes que se rodean de mediocres para disimular su propia mediocridad y por estudiantes que ridiculizan al compañero que se esfuerza.
- Mediocre es un país que ha permitido, fomentado y celebrado el triunfo de los mediocres, arrinconando la excelencia hasta dejarle dos opciones: marcharse o dejarse engullir por la imparable marea gris de la mediocridad.
- Es Mediocre un país, a qué negarlo, que, para lucir sin complejos su enseña nacional, necesita la motivación de algún éxito deportivo.”
lunes, 14 de abril de 2014
¿QUE EDAD TENGO…?
En los
albores del atardecer de la vida, sólo me queda abrir el alma, y ahí vá:
Ya no
tengo tiempo para lidiar con mediocridades. No quiero estar en reuniones donde
desfilan egos inflados. Desprecio a los oportunistas y a las personas
mezquinas. No tolero a los envidiosos
que tratan de desacreditar a los más
capaces para apropiarse de sus lugares, talentos y logros. Ya no tengo tiempo para proyectos
megalomaníacos. No participaré en conferencias que establecen reglas engañosas
para erradicar la miseria en el mundo.
No quiero que me inviten
a reuniones donde se pretende solucionar los problemas del milenio. Ya no tengo
tiempo para reuniones interminables donde se discuten: estatutos, normas,
procedimientos y políticas, sabiendo que no se va a lograr nada.
Ya no tengo tiempo para
soportar el egoísmo de personas que, a pesar de su edad cronológica, son unos
inmaduros. No quiero ver las agujas del reloj avanzando en reuniones de
"confrontación", donde solo “ponemos sobre la mesa” las
opiniones egoístas.
Recuerdo ahora a Mário de Andrade, que afirmó: “Las personas no discuten los contenidos, sólo sus títulos". Mi tiempo es
escaso como para discutir títulos;
quiero la esencia. Mi alma tiene prisa; quiero
vivir al lado de gente humana, muy humana; que sepa reír de sus errores, que no se envanezca con sus triunfos, que no se
considere electa antes de tiempo, que no huya de sus responsabilidades, que defienda la dignidad de los marginados y
que desee tan sólo andar al lado de Dios, si existe.
Caminar junto a cosas y personas de verdad. Disfrutar de un afecto absolutamente sin
fraudes, nunca será una pérdida de tiempo. Lo esencial es lo que hace
que la vida valga la pena. Quiero rodearme de gente que sepa tocar el corazón
de las personas. Gente a quien los golpes duros de la vida, les enseñó a crecer con toques suaves en el alma. Si…. Tengo
prisa por vivir con la intensidad que solo la madurez puede dar. Mi meta es
llegar al final satisfecho y en paz conmigo mismo por el deber cumplido. Ojala
pueda ser así…
Aquí
dejo un poema de José Saramago:
¿Qué cuántos años tengo?
¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento!
La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso o lo desconocido...
Pues tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la
convicción de mis deseos.
¡Qué importa cuántos años tengo!
¡No quiero pensar en ello!
Pues unos dicen que ya soy viejo
otros “que estoy en el apogeo”.
Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que
mi corazón siente y mi cerebro dicte.
Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo
que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.
Ahora no tienen por qué decir:
¡Estás muy joven, no lo lograrás!...
¡Estás muy viejo, ya no podrás!...
Tengo la edad en que las cosas se miran con calma, pero con el
interés de seguir creciendo.
Tengo los años en que los sueños,
se empiezan a acariciar con los dedos,
las ilusiones se convierten en esperanza.
Tengo los años en que el amor:
a veces es una loca llamarada,
ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada y otras...
un remanso de paz, como el atardecer en la playa.
¿Qué cuántos años tengo?
No necesito marcarlos con un número,
pues mis anhelos alcanzados,
mis triunfos obtenidos,
las lágrimas que por el camino derrame al ver mis ilusiones
truncadas...
¡Valen mucho más que eso!
¡Qué importa si cumplo cincuenta, sesenta o más!
Pues lo que importa: ¡es la edad que siento!
Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero,
pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis
anhelos ¿Qué cuántos años tengo?
¡Eso! ...¿A quién le importa?
Tengo los años necesarios para perder ya el miedo y hacer lo que
quiero y siento!
Que importa cuántos años tengo.
o cuantos espero, si con los años que tengo.
¡aprendí a querer lo necesario y a tomar, sólo lo bueno!
domingo, 26 de enero de 2014
EN LA CALLE ES MÁS LEGITIMA LA DEMOCRACIA, QUE LA ALCANZADA POR LAS PAPELETAS EN LAS URNAS….
Cuando la propiedad se acumula en unas
pocas manos, acaba por serles arrebatada. Y el hecho que siempre acompaña:
cuando hay una mayoría que tiene hambre y frío, tomará por la fuerza lo que
necesita. Y el pequeño hecho evidente que se repite a lo largo de la historia:
el único resultado de la represión es el fortalecimiento y la unión de los
reprimidos. El pueblo no tiene miedo, porque también se lo han robado, por eso
vemos la calles manifestaciones por el descontento y por la miseria. Así
tenemos, el Gomonal en Burgos (sinónimo de resistencia), las huelgas de basuras
en Alicante, los preferentitas de Bankia, etc.
Nos han robado hasta la democracia. No
voy a entrar en el enfrentamiento que hizo Montesquieu y Rousseau sobre la
democracia, pero para éste último decía que “era imposible la democracia en una
sociedad donde unos pocos tuvieran demasiado y muchos carecieran de todo”.
Por eso, hemos llegado por las evidentes
injusticias y el abandono de los derechos sociales a poder afirmar que las
llamadas democracias representativas son una farsa que es necesario desmontar.
Pero el sistema actual se blinda para seguir manteniendo la farsa, es mucho más
rentable para poder mantenerse en el poder. De ahí, que no se aprueben jamás
leyes que obliguen a los gobernantes a cumplir las promesas que un día
presentaron para ser elegidos. Y de aquí nos viene que son los mercados (que no
tienen derecho al voto) los que nos exigen tomar medidas tan drásticas y
marcarnos el camino. Pero, ¿en donde están los delincuentes que han robado los
derechos y las oportunidades del pueblo?. ¿En manos de quienes están el dinero
del rescate bancario? ¿Por qué se unen los Ministros de Hacienda, Justicia,
Interior y el Fiscal General para salvar a la Infanta? ¿No somos todos iguales
ante la ley, o es también una farsa que hay que seguir manteniendo? ¿Y por qué
no están en la cárcel los corruptos y
los incumplidores de programas?. Por eso creo que la verdadera democracia está
en la calle y no en los políticos, pues en ellos no residen la legitimidad democrática
(si la formal, la que obtienen con un grado de participación pobre en las
urnas), pero no la moral, ya que ésta se encuentra en la calle, en el pueblo.
Recordemos que ha habido elecciones al
Parlamento Europeo que no han conseguido, el algunos países, llegar a una
participación del 20% del censo electoral. Es decir, los gobernantes se aúpan al
poder con el apoyo de menos de uno de cada
cinco electores. ¿Es justo esta representación de nuestros políticos?.
Oír decir tan simplemente por el
Presidente del Gobierno, de que debemos comprender que el Rey es una persona, que
es un ser humano, y ¿que son el resto de los millones de españoles que viven en
la miseria y en el umbral del hambre?. Así lo decía John Steinbeck: “Si tienes
problemas o estás herido o necesitado… acude a la gente pobre. Son los únicos
que te van a ayudar… los únicos”. “En donde haya una pelea para que los
hambrientos puedan comer, allí estaré. Donde haya un policía pegándole a uno,
allí estaré”.
La necesidad más primaria del ser humano, como es el hambre, capaz de perturbar a cualquiera cuando aparece, es el motor de esta historia, las necesidades, la solidaridad, el amor o la honradez, son algunos de los adjetivos que deferían definir nuestra sociedad, pero nos hemos olvidado porque el corazón humano de los políticos se están secando… Me gustaría encontrar el corazón amigo…
miércoles, 8 de enero de 2014
EL GOBIERNO NO TIENE SENTIMIENTOS .... NI CORAZÓN
Con qué argumento obligamos a sufrir a nuestros
ciudadanos. Este Gobierno no entiende de sentimientos, de solidaridad, ha
olvidado que somos seres humanos, que podemos pensar, reflexionar, dialogar,
aceptar sugerencias. Pero no, estos politicos no matan con armas, sino que
matan recortando con las armas del poder, de la ideología, haciendo daños
a los más débiles, a los más pobres,
a los que menos tienen, a los que la vida le han roto el
corazón.
¿Es que los deshauciados, los
pensionistas, los preferentistas, los marginados, los niños de la calle, los
emigrantes , etc., acaso no tienen corazón?. Que le pasa a esta sociedad que
esta ahogando a los que sufren más. Tengo derecho a expresar mi
indignación ante tanta destrucción. No hay peor ciego que aquel que no quiere
ver. Esta enfermedad le esta llevando al Gobierno a hacer las mayores
fechorias de la historia, con tal de mantenerse en el poder. Qué es lo que
desea, ¿volver a épocas que nunca debieran existir? Lo que desean es ¿que
se produzcan una rebelion social, una guerra civil?. El pueblo está dispuesto
a formar un frente de resistencia ante tanta masacre de derechos, de
dignidad, de libertades, de solidaridad, es la única arma que nos queda
a los ciudadanos porque queremos que nuestros hijos encuentren un mundo
donde puedan crecer sin odios, en concordia y en paz, y ellos se lo
merecen.
Decía Alex Rovira (empresario, escritor , economista, conferenciante
internacional y consultor español.), “TANTA
BUENA GENTE A PIE DE CALLE. Y TANTO IMBÉCIL REDOMADO, LERDO PROFESIONAL,
NARCISISTA Y CORRUPTO EN EL PODER. ALGO NO CUADRA“.
Creo que vivo en otro país, estoy
confundido, no es posible escuchar un Presidente triunfalista, mientras un
pueblo se desangra. No es un político nada creíble... Estamos en un país
podrido que huele muy mal, ¡en que manos hemos caído, que tropa tenemos...!
Carlos Castaneda (Peru, 1925), aunque no es su verdadero nombre, en su
libro: “Las enseñanzas de Don Juan“, nos deja algo interesante para nuestra
actualidad: “Todos los
caminos son válidos. Pero debes tener siempre presente que un camino es
solamente un camino, y si crees que no debes seguirlo, no has de permanecer en
él bajo ningún pretexto. Tu decisión de mantenerte en él o de abandonarlo debe
estar libre de miedo y de ambición. Y para tener esa claridad mental has de
llevar una vida disciplinada. Solo entonces sabrás que cualquier camino es
solamente un camino, y no te equivocarás al dejarlo si eso es lo que te dice tu
corazón. Observa cada camino detallada y deliberadamente. Hazlo tantas veces
como sea necesario. Entonces te debes formular una pregunta. Es una pregunta
que solamente se plantea la gente mayor. Mi maestro me la enseñó cuando yo era
muy joven y mi sangre demasiado vigorosa para que la pudiera entender. Ahora la
entiendo. La pregunta es: ¿Ese camino tiene corazón?. Si lo tiene, el camino es
bueno; si no, es inútil”.
Los caminos no
llevan a ninguna parte, pero unos tienen corazón y los otros no. Unos otorgan
un viaje agradable, y te haces uno con ellos. Los otros te confunden y te
arruinan la vida. Unos te hacen fuerte, los otros te debilitan. Unos te
ilusionan, otros te destrozan…
El problema es que
nadie se plantea esta pregunta, y cuando finalmente el hombre se da cuenta de
que ha seguido un camino sin corazón, el propio camino está a punto de
devorarlo. En este punto muy pocos son capaces de parar a deliberar y
abandonarlo.
Y esto es lo que
está pasando a nuestros políticos, han elegido un camino sin corazón por creerse
poseedores de la verdad, y por ese camino se va destruyendo todo lo que no
concuerda con sus ideas, pero antes o después, ese camino le llevará a la
perdición…
Qué importante es saber expresar, saber decir lo que uno siente, lo que
uno necesita, lo que uno piensa, lo que uno quiere, lo que uno desea y busca
desesperadamente. Espero encontrar la mano amiga.
lunes, 6 de enero de 2014
NO TE RINDAS ...
Después de unas fiestas que tienen más de
paganas que de riqueza del alma, quiero dejar este poema atribuido a Mario
Benedetti que es una llamada a la no resignación… A mí me está ayudando a
vivir, si algún lector le ayuda me sentiré más humano.
No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el
deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos,
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos,
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque ésta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque ésta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.
Un bello canto no
solo a la esperanza, también una llamada a lo humano que palpita en nosotros.
domingo, 8 de diciembre de 2013
NO DEJEMOS EN EL OLVIDO AL GENERAL JOSE MARIA TORRIJOS
Hace una semana, asistí
en Alhaurin de la Torre a la inauguración de la décima segunda Jornada de
homenaje a Torrijos y la Constitución, organizada por la Asociación Histórico-Cultural
Torrijos 1831; aquella noche recibí una bofetada de aire fresco porque me
hablaban de libertad y de lucha; y lo digo con el corazón en la mano, me sentí
rejuvenecido por lo que estábamos
celebrando.
Me vinieron muchas
cosas a la cabeza: las luchas del pasado y las vivencias del presente. Empecé a
entender que la represión es el reflejo del fascista, que no hay triunfo sin
renuncia, victoria sin sufrimiento y libertad sin sacrificio. Un hombre nace
con libertad, pero esa libertad se destruye cuando el mismo hombre se la
impide.
La libertad sólo
debe disfrutarla quien se la merece, y mi libertad acaba donde empieza mi
silencio, y gracias a ella tenemos un sueño, la utopía, lástima que haya
algunos que nos lo prohíban diariamente. Decía Cicerón que “la libertad sólo
puede fijar su residencia en aquellos Estados en que el pueblo tiene el poder
supremo.”
Con estos actos, estamos
sacando del olvido a quienes fueron fusilados por defender la libertad. Murieron
por amar la libertad, por querer un mundo mejor para sus hijos/as. Murieron por
defender unos ideales, que iban unidos con la libertad, una libertad que
contrae dos grandes responsabilidades: la igualdad y la fraternidad.
Su ideal era el bien
colectivo, no de unos pocos. Su ideal era no estar sometidos. Su ideal era
progresista. Miraban el futuro con otros ojos, mujeres y hombres con los mismos
derechos. Las desigualdades desaparecerían. Eran luchadores por lo que
realmente es la vida.
¡Por eso no
olvidamos!, porque es de justicia recordar, porque muere quien deja de ser
recordado. Sobrevivir era resistir, cada día y cada noche; el tiempo
no olvida quien lucha por la libertad, el tiempo recuerda las lágrimas
derramadas. Cuando la muerte se acerca, el miedo desaparece, y el
corazón se agita compasadamente en busca de la libertad merecida.
Por eso hoy
revivimos los hechos acaecidos en 1831, donde el general José María Torrijos
quiso defender a una España que se la tragaba el absolutismo; de la misma
manera nos rebelamos y desafiamos para encontrar la verdad, la memoria, el
pasado, el presente y el futuro. Por el amor, por la libertad y lo que esta
contrae, por todo ello ¡no olvido los días de lucha!.
La lucha continua,
en nuestra mente, en nuestro corazón, en las calles, en las plazas... Este
trágico desenlace de su vida explica el que haya pasado a la historia, con toda
justicia, como un gran símbolo de la lucha contra el despotismo y la tiranía,
con los rasgos de nobleza y serenidad épicas, propios del héroe romántico.
Cuando el
insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa, estaba
prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por
desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana
familia, sólo decía: «¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma
no muera!». Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua:
pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre
del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un
cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma
insatisfecha dura toda la vida.
Lo mismo se dice del general Jose Maria Torrijos, que era según
su biógrafa más reciente, la historiadora Irene
Castells, un "liberal utópico", entendiendo
"la categoría de utópico en su sentido histórico, en la del que aspira a
un objetivo noble convencido de su necesidad y viabilidad hasta tanto la
realidad no le demuestre lo contrario. La insurrección que buscaban estos
liberales, con Torrijos a la cabeza, en su último intento desesperado, era
arriesgada; pero la veían necesaria y posible. Se convirtió en utópica tras los fusilamientos de Málaga, no
antes. [...] Ante el fracaso de su intento en las playas malagueñas, él
seguiría creyendo que el mañana era la caída del absolutismo y el triunfo de la libertad y la Constitución. Incluso en términos de resultados, no cabe duda que este
esfuerzo heroico de Torrijos y sus compañeros contribuyó al debilitamiento del
régimen absolutista y facilitó el camino de la revolución liberal en España".
De ahí, en esta mañana dominical solo me
queda decir con un grito desesperado, junto a todos los libertadores, y como recuerdo póstumo a Nelson Mandela que sacrifico su libertad durante 27 años por su pueblo, por la concordia y la paz.
Alzemos nuestra voz y digamos: ¡VIVA LA LIBERTAD!
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